En el mediterráneo existe una cultura gastronómica interesante, siendo característico que se desarrolle la conservación de la dieta rica en frutas, frutos secos, cereales, pero quizás no conoces parte de los alimentos más saludables y tradicionales.
TOP alimentos saludables que puedes encontrar en la dieta mediterránea
En este artículo te vamos a mostrar algunos alimentos autóctonos de la zona, una parte de los que se encuentran incorporados desde hace muchos años en su cultura.
Aceite de oliva
Existe un alimento que se volvió el emblema de la dieta mediterránea: el aceite de oliva.
El cultivo del olivo se originó en Europa hace más de cuatro mil años antes de Cristo, y entre sus características positivas se encuentra ser un pilar de la prevención del cáncer de mama, y sirve también para reducir los valores de colesterol alto.
Puedes darle uso para aderezar comida y para cocinarlas también, pero debes considerar que es un producto calórico.
Otro detalle es que debes verificar que para conservar las propiedades medicinales debes buscar que el aceite sea virgen, ya que si es refinado perderá las virtudes medicinales.
Pimiento
Este alimento se ha convertido en un ingrediente imprescindible en la dieta. Es de origen americano y es aplicado en casi todo el mundo para preparar ricos platos, aparte puede ser el protagonista de las recetas más exquisitas.
El pimiento proporciona dosis grandes de zeaxantina, el cual es un antioxidante que previene enfermedades oculares. También es una fuente de vitamina C, ya que puedes obtener 190 mg, por tan solo 100 g de pimiento rojo.
Trigo
El trigo está definido como el pilar básico en la alimentación mediterránea, ya que no cabe duda que es el rey en las mesas.
A pesar de que en la actualidad se suele rechazar por su mala reputación con respecto al gluten, sigue siendo un alimento muy saludable para las personas que no padecen intolerancia a este.
Habitualmente, se ingiere en forma de harina, pasta, pan, rebozados, entre otros preparados, y se considera una fuente muy sólida de hidratos de carbono, el cual es un nutriente que aporta mucha energía y que no puedes dejar de consumir.
Zanahoria
En la región mediterránea, la zanahoria ha crecido de manera natural siempre, por ello se considera otro de los excelentes vegetales en la dieta mediterránea. Además, en el mercado puedes conseguir mucha variedad de zanahorias que poseen distintos orígenes.
Se considera que es la hortaliza que genera más provitamina A, lo que ayuda a la salud de las mucosas, la piel y para la conservación de la vista. También se recomienda como digestivo natural, ya que es ideal para atacar la diarrea y el dolor en el estómago.
Legumbres
Cuando hablamos de legumbres, consumir guisantes y lentejas es un pilar desde los tiempos más antiguos, ya que este alimento era muy bien visto por los romanos y los griegos.
Se consideran una gran fuente de proteína vegetal, con las que puedes obtener los aminoácidos necesarios si los combinas con cereales. Por otra parte, son una gran fuente de hidratos de carbono de absorción en forma de fibra.
Ajo
Aunque este alimento proviene del medio Oriente, los romanos y los griegos lograron definir sus propiedades medicinales, y así fueron incluidos en la dieta mediterránea. Por eso, el ajo se considera como un ingrediente típico y esencial.
Aparte de darle mucho más sabor a la preparación de los guisos, resulta ser uno de los mejores antibióticos naturales que hay. Estudios demuestran que el consumo de 10 gramos al día de ajo, ayuda a disminuir el riesgo de padecer cáncer.
La carne blanca
De manera tradicional, en los pueblos mediterráneos se ha consumido mucho más carne roja que carne blanca, y es que con el tiempo, la carne blanca pasó a consumirse de forma masiva.
En comparación con la carne roja, la carne blanca posee menos colesterol y grasa saturada, por eso el pavo y el pollo se mantienen como buenas opciones de proteína. Te recomendamos elegir siempre las partes magras que tenga la carne.
Naranja
La naranja es una fruta que se originó en Oriente y se definió su popularidad en la región mediterránea. Su consumo es una fuente vital de vitamina C, algo necesario para el organismo y un nutriente eficaz que actúa como protección antes las infecciones.
Es muy favorable para las personas que padecen de anemia, ya que ayuda a la absorción del hierro. Las naranjas logran estimular la eliminación del ácido úrico por medio de la orina.
Lechuga
La lechuga es considerada como un alimento rico en fibra, así que puede provocar flatulencias por ello.
Recomendamos consumirla a diario, ya que posee una larga lista de nutrientes que pueden ser provechosos para nuestro organismo, como potasio, calcio, fósforo, magnesio y vitamina A.
Muchas son las investigaciones de científicos que se enfocan en los alimentos que dan beneficios para la salud, entre estas podemos nombrar a los estudios para la protección cardiovascular y para la prevención del cáncer.
La dieta mediterránea ayuda al organismo por la cantidad de micronutrientes que provee, esto es gracias al uso de las verduras de temporada, condimentos y las hierbas aromáticas.